El domingo por la mañana, luego de una noche intensa de mucho trabajo, el plan era seguir en lo mismo. Sin embargo, al darnos cuenta de que el internet se fue, no había mucho que hacer, pues sin él los trabajos son imposibles de terminar. Es entonces cuando nos preguntamos…y ahora ¿qué vamos a hacer? Tirando ideas al aire, Jose dijo: “Dialo, vamos pa’ la playa” Claro, que pensamos que era relajando, y al principio lo fue, pero luego de repetírnoslo varias veces se nos clavo en la cabeza. Ya había un plan armado, el próximo paso era volverlo realidad. Lo más difícil de todo fue convencer a Gloria de que era un buen plan y que se iba a dar todo bien ya que ella se resistía a ir porque tenía un compromiso a las 4 de la tarde.
Cerca de las 12 arrancamos pa’ Boca Chica con to’ el pie. En aquel momento todo se olvido…responsabilidades, exámenes y el tiempo. Lo que importaba era llegar a la playa y disfrutar el momento ya que nuestro lema es “La vida es una y hay que vivirla al máximo”
Como todo buen dominicano que va a Boca Chica nos tiramos nuestro manjar típico de allá: “Peje frito” (pescado frito), batata frita, plátanos verdes fritos, y las famosas longplain (yaniqueques del tamaño de un disco de los de antes jejeje) y el refresco de saborrrrrrrr. ¿Qué más se puede pedir?
Regresamos a la ciudad a las 4 y pico con ganas de que el día no acabara para poder recuperar el tiempo perdido con nuestros trabajos de la universidad...
Es por eso que ahora es gas nos está pelando….estamos atrasados…pero nada “la vida es una” y no nos arrepentimos, es mas lo volveríamos a hacer si volviéramos a ese dia jajaja!